lunes, 25 de abril de 2016

Desierto en la Concurso

Allá por el año 2000, el maestro Luis Francisco Esplá inauguraba la tradición de las Corridas Concurso en el coso de Pignatelli. Hoy, 16 años más tarde, debemos darle una vuelta más, a tenor de los resultados de los últimos dos años. Una corrida concurso debe ser eso: una Corrida Concurso. Toros de diversos encastes, en tipo y con unas reatas y notas contrastadas. Esto no puede convertirse en una limpieza de cerrados ni un campo de pruebas. Aquí se debería venir a ganar y con lo mejor de cada casa. Empresa, ganaderos y toreros deberían saber a qué vienen a esta corrida a Zaragoza.
El primero, de Bohórquez, era amplio en todo su cuerpo, desde los pitones hasta la penca del rabo. Fue recibido con una ovación por la afición. Cumpliendo en varas, comenzó a quejarse en banderillas. La lidia que le administraron no fue la mejor y Rafaelillo comenzó por bajo cuando el toro quizá pedía que le condujeran a su altura. Mirón y probando al coleta, se fue apagando poco a poco. Tampoco el toreo hizo nada por mejorarlo. Un toro más.
647 kg. pesó el de Cuadri que hizo segundo. Y 50 kg. que le habrían cabido más. Largo como un tren este Ferroviario que fue recibido con palmas de salida. Decidido el torero de la tierra con el capote, con el que consiguió algún lance estimable. El toro demostró en el caballo lo que iba a ser: falto de casta y clase, con la cara siempre a media altura. Tocaron a banderillas y aquí llegó uno de los puntos fuertes de la tarde. Iván García, que es un torero de la montera al lazo de la zapatilla, hizo una lidia de manual, dándole al animal lo que necesitaba. Ambel y Manolo de los Reyes se lucieron con los garapullos y recibieron una ovación. A Paulita se le veía con ganas, pero la mala suerte quiso que el toro de Cuadri se lastimase la mano derecha y se inutilizara para la lidia nada más comenzar la faena. Y aquí acabó este capítulo.
Manso en el caballo y noble repetidor en la muleta el protestado toro silleto de AlcurrucénManuel Escribano estuvo con oficio con él, templado, pero toreando fuera de cacho. Acabó por hacer un toreo más efectista que, junto a un espadazo saliendo trastabillado, le valió la única oreja cortada en el ciclo.
Imponente de arboladura el albaserrada de Adolfo Martín, que recibió una ovación de salida. Tomó cuatro varas por parte de Juan José Esquivel, que toreó bien a caballo. Cumplió el animal, pero viniéndose a menos, con más genio que otra cosa. Salió del encuentro con el caballo embistiendo a arreones. Rafaelillo comenzó doblándose con el toro, pero el perder la muleta hizo que el animal decidiese que ya no embestía, desentendiéndose de la pelea. La izquierda de Rafaelillo la vimos con la muleta sólo a la hora de matar. Tragándose la muerte acabó el de Adolfo.
Fuente Ymbro es una ganadería con una variedad de presentación en sus toros que asombra. El que ha mandado a Zaragoza parecía hecho por Picasso. Cara de vaca, pitones camargueses, una pelota enorme en el morrillo, largo como un tráiler de varios ejes y alto como un flamenco. En definitiva, feo como él solo. Derribó a Sangüesa en la primera vara. Puro espejismo. El plato fuerte de la corrida llegaría en el tercio de banderillas. Muy bien Ambel con la capa y extraordinarios Iván García y Manolo de los Reyes con los palos. Cuando se llenan de contenido todos los tercios, esto genera interés. En la muleta el toro fue un marmolillo. El de Alagón se quiso justificar estando más tiempo del necesario delante de la cara del animal.
El de la Jota correspondía a la ganadería de la tierra, Los Maños. Anovillado, paletón y con la cara un tanto lavada. Fue muy protestado por el tendido. No debió pasar el reconocimiento. La primera vara fue de bravo, empujando hasta con el rabo. Tres puyazos recibió, viniéndose abajo conforme avanzó la lidia. En la muleta acabó por rajarse y huyendo a tablas. Escribano anduvo profesional con él y dejó una estocada tendida.
Una Concurso a la que deberíamos dar una vuelta de tuerca. Porque una corrida de este tipo no sólo es necesaria, sino imprescindible. Por el toro y por la diversidad de encastes.

  • Zaragoza. Plaza de toros de La Misericordia. 2ª de la Feria de San Jorge. Corrida Concurso de ganaderías. Casi media entrada en tarde ventosa.
  • Rafaelillo: ovación con saludos y silencio.
  • Paulita: silencio y ovación con saludos.
  • Manuel Escribano: oreja y leve petición.
  • Tras romper el paseíllo hubo una ovación para la UYTAC y para los matadores, que salieron a recogerla al tercio.
  • PREMIOS: Mejor Toro: desierto; Mejor Lidiador: Iván García, en el segundo toro; Mejor Picador: Juan José Esquivel, en el cuarto toro

sábado, 23 de abril de 2016

Ni Dragón embistiendo ni San Jorge toreando

Crónica disponible en:

http://www.porelpitonderecho.com/inicio/ni-dragon-embistiendo-ni-san-jorge-toreando-2883


Abría sus puertas el coso de Pignatelli en esta temporada 2016 con un encierro de la divisa extremeña de López Gibaja, que tras sus actuaciones en Valencia con diversas novilladas debutaba en plaza de primera con corrida de toros. El antecedente más cercano en esta plaza fue aquel Marqués, que ganara la Corrida Concurso de esta misma plaza en 2013. La presentación del encierro ha sido desigual, con dos toros, tercero y quinto, absolutamente impresentables en una plaza de la categoría del coso zaragozano.
Joselito Adame hacía el paseíllo desmonterado al debutar como matador en Zaragoza. En ninguno de sus dos toros colocó al animal en suerte, cosa que en el cuarto se le exigió con firmeza por parte de la afición, ya que el toro empujó de verdad en su primera vara. Pero vayamos por partes. Su primer toro, un manso de libro, humillaba al coger los trastos. Tras una lidia en la que no se le pudieron dar más capotazos, se puso el hidrocálido a seguir por el mismo palo que su cuadrilla. Total, que entre el poco temple, que estaba toreando desde la Plaza del Pilar y que el animal se fue yendo poco a poco abajo, nos quedamos sin nada. Bueno, sin nada no. Adame trajo por trastos dos bonitas mantas zamoranas que hubiesen hecho las delicias en el invierno de la ciudad. Es materialmente imposible torear decentemente con semejantes carpas de circo. El cuarto, como ya hemos dicho, tomó una buena primera vara que fue bien administrada por Óscar Bernal. ¿Y qué hizo Adame? Una demostración de eso que se conoce por Tauromaquia 2.0 a la que se añadió una buena cantidad de zapatillazos. Tras matar al animal, el espada, con el permiso de la autoridad abandonó la plaza.
Mi reflexión, como aficionado, es: ¿cómo se puede permitir que el director de lidia abandone la corrida sin que esta haya terminado? Una vergüenza, un despropósito y, sobre todo, una falta de respeto a la afición y a sus compañeros.
Juan del Álamo entró a última hora por sustitución de David Mora, con una rotura fibrilar en el gemelo. Qué casualidad. Álamo tuvo como primer enemigo a un toro al que le hicieron todo al contrario a partir de su paso por el caballo, donde fue bien picado por Paco María. Su faena con la muleta fue más larga que un día sin pan. Y no contento con ponerse realmente pesado, se entretuvo en pegar circulares de todo tipo. Con el quinto apenas tuvo opción. Un toro manso, descastado, mal lidiado y mal presentado.  Un capítulo vacío.
Fortes es un torero con valor. Con mucho valor. Pero poco toreo. Transmite al tendido una sensación de inseguridad que es difícil de explicar. Quizá el mejor ejemplo es su faena al tercer toro de la tarde. En las cercanías, con escaso temple y sin conducir la embestida del toro, que tampoco era nada del otro mundo. El público, con sensación de que podía ser cogido en cualquier momento. Y Fortes acabó el cuadro con unas bernadinas ajustadísimas. Toreo poco, valor todo el del mundo. Por cierto, lo de brindar con una rosa y un libro es una estupidez de proporciones considerables. Esto es Aragón, por si no se ha enterado alguno. El sexto toro no lo quiso ni ver. Bronco, sí. Pero Fortes ni se puso. Casi que lo agradecimos, porque más de dos horas y media de sopor son mucho sufrir de forma gratuita.
Y así acabó la primera de feria. Ni Dragón embistiendo ni San Jorge toreando. Mañana la concurso. Esa va a ser.

  • Zaragoza. Plaza de toros de La Misericordia. 1ª de la miniferia de San Jorge. Algo más de un tercio de entrada en tarde primaveral con el cierzo propio de la tierra. Corrida de Toros de López Gibaja, desiguales en presentación y juego.
  • Joselito Adame: ovación con saludos y silencio.
  • Juan del Álamo: ovación con saludos y silencio.
  • Jiménez Fortes: leve petición y pitos.